EL PAPEL Y RIESGO DEL PERIODIMOS REGIONAL
Heli Ocaña Alejo
Pastdecano Nacional del CPPe
Vivimos una época fascinante, controvertida, compleja, competitiva, y de la inmediatez. La comunicación, no es ajena a ella. Son épocas de eclosión de la comunicación, del catastrofismo, del sensacionalismo y la posverdad.Los comunicadores viven (vimos) condicionados por la presión social y el afán de la primicia y la iniciativa, abonada por la tecnología de la información y la comunicación. Las redes sociales son medios poderosos y alternativos que se han convertido en canales de transmisión inmediata de hechos a velocidades incalculables.
Quienes ejercen el periodismo profesional, disputan con quienes, sin serlo, son informantes activos. Esto, de por sí es un riesgo, porque no usa la técnica periodística, para analizar y procesar, condiciones básicas que permiten definir formas de impactar a través de titulares y pepas bien elaboradas que suele hacer un comunicador profesional.
Vivimos tiempos de dictadura tecnológica. Se transmiten hecho sin clasificación ni procesamiento, poniendo en riesgo el periodismo profesional; porque la calificación del impacto de la noticia pasa en fresco a manos del destinatario. Un destinatario poco culto puede terminar solapando o agravando el objetivo de la información.
Ladislao Felipe Meza Landavery y José carlos Mariátegui
Un análisis reflexivo de los hechos merece de un espacio y tiempo, si esto es transmitido en su naturalidad puede perder su eficacia. Antes el portador de la noticia procesaba la información, ahora el destinatario es el sujeto activo.
El periodismo regional ancashino tiene en sus manos la responsabilidad de construir una realidad cultural, dinamizando la comunicación en base al contexto regional. El derecho de la sociedad a estar informado va de la mano con las libertades individuales de informar y estar informado. Aquí hay una línea muy delgada, sobre todo, cuando estos hechos están vinculadas a la corrupción, la delincuencia y el narcotráfico. Analizar el gobierno regional de Álvarez, es una verdadera escuela que permite definir de qué es y no debe ser o lo que debe hacer un buen periodismo regional.
La práctica periodística es buscar una noticia para a partir de ella elaborar una nota, una crónica, un reportaje, el titular, la pepa. Estas serán muy sabrosas si son redactadas por el periodista, o el autor. Digo esto, porque, en estos tiempos de la Inteligencia Artificial (IA), la tarea se viene haciendo más sencillo, pero hay un riesgo grande de perder la naturalidad y originalidad. Es lógico, la inteligencia natural es inigualable.
En esta era de avances vertiginosos de la IA, ésta, puede señalar el dónde y cuándo de los hechos, pero el cómo y por qué, es responsabilidad del periodista. Por tanto, en las 4 preguntas de dónde, cuándo, cómo y por qué, siempre predominará el rol del redactor, del ser humano.
El periodismo es una actividad empática que dice a la gente lo que le pasa a la gente. Siendo Ancash una región con diversidad cultural y riqueza incomparable, el periodismo puede contribuir en la elaboración de proyectos y redes para poner en valor lo nuestro. El periodismo, denominado el quinto poder del Estado, lo es también en la región, por tanto, saquemos provecho de ello.
Finalmente, el riesgo mayor del periodismo regional es enfrentar la corrupción. Los corruptos nunca serán benevolentes con la verdad. Por tanto, las denuncias, acosos, amenazas y condicionamientos habrá siempre para torcer la buena ejecutoria del buen periodista; pero si el periodista está imbuido de valores, vencerá la tentación irracional de la injusticia y el poder de intereses mezquinos.
L. 15 de octubre de 2023 - Disertación en los 43° aniversario de Prensa Ancashina. Gracias Lucio Pinedo por la invitación.