DOCENCIA,
PROFESIÓN CON ELEVADA
RESPONSABILIDAD SOCIAL
Helí Ocaña Alejo
¡Feliz
día maestros del Perú!
“Docente es la persona que se
dedica a la enseñanza”. Siendo una definición importante, por extensión alude a
todos los que hacen dicha acción en la educación formal y no formal, educación
básica o superior, en el aula o la administración.
La docencia es ejercida por un profesional preparado en las ciencias pedagógicas, que se dedica a plasmar con conocimiento y creatividad, los procesos de aprendizaje buscando que los estudiantes logren los propósitos de la educación. Asimismo, es un profesional dedicado al acto de la enseñanza en un contexto social determinado, buscando que las personas logren conocimientos, habilidades y destrezas, valores y el saber ser (ciudadanía) de manera didáctica y duradera.
La docencia es ejercida por un profesional preparado en las ciencias pedagógicas, que se dedica a plasmar con conocimiento y creatividad, los procesos de aprendizaje buscando que los estudiantes logren los propósitos de la educación. Asimismo, es un profesional dedicado al acto de la enseñanza en un contexto social determinado, buscando que las personas logren conocimientos, habilidades y destrezas, valores y el saber ser (ciudadanía) de manera didáctica y duradera.

En ese proceso nada sencillo, se requiere tomar en cuenta los temas vitales que contribuyen poderosamente en la función educadora. Esto es, la situación económica del país, el ambiente geográfico, la historia del país, la autoridad de los gobiernos de turno, la ausencia
de una clase política dirigente con visión de país, y nuestra condición de país
dependiente y primario exportador.
Con justa razón concluimos, que, a lo
largo de nuestra vida republicana, no tuvimos una autoridad del Estado que
haya visto a la educación desde una perspectiva estratégica y con desarrollo sostenido. Esos
vacíos en la visión de nuestros gobernantes han hecho que la educación no tenga
la importancia que merece. Nos dice León Trathemberg, “La Reforma Educativa de Velasco en 1972 fue
el esfuerzo de diagnóstico, reflexión y diseño más serio del siglo, y sacó la
educación de las aulas para abordarla como una cuestión política y
económica-social, que debía comprometer la participación organizada de la
comunidad (nuclearizada) vinculando la educación con el desarrollo y el
trabajo”; siendo verdad lo dicho por Trathemberg, en la ejecución de dicha reforma se produjeron una
serie de contradicciones con los actores educativos, lo que abonó para que se convierta en un proceso trunco.
Entre vaivenes, tuvimos que llegar recién al
S. XXI para señalar con precisión que la educación es un pilar fundamental del desarrollo y que debe ser considerado como uno de los ejes de la política de Estado. Tal importancia fue plasmada en la política 12 del Acuerdo Nacional firmado el 2002, expresando como derecho de la población el “Acceso universal a una educación pública
gratuita y de calidad y promoción y defensa de la cultura y del deporte.” Sin embargo, se convirtieron en un texto declarativo por que sus efectos prácticos en la toma de decisiones aún están en espera.
Es cierto, dicha política del AN fue
tomada como base para la construcción del Proyecto Educativo Nacional que fue aprobada
el 2007; pero dicho PEN no fue un proyecto movilizador que permita implementar acciones concretas rumbo a los resultados esperados.
En lo que respecta al docente, el PEN le dedica el objetivo 3 planteando “maestros bien preparados ejercen profesionalmente la docencia.” Es decir, se apuesta por una docencia con sólida formación profesional, que conozca los problemas del país, que tenga capacidad de interpretar la realidad, que sistematice sus experiencias y conocimientos para aportar en procesos de innovación, que sea un sujeto sensible con los problemas de la comunidad y sobre todo, con convicción profesional y compromiso social.
En lo que respecta al docente, el PEN le dedica el objetivo 3 planteando “maestros bien preparados ejercen profesionalmente la docencia.” Es decir, se apuesta por una docencia con sólida formación profesional, que conozca los problemas del país, que tenga capacidad de interpretar la realidad, que sistematice sus experiencias y conocimientos para aportar en procesos de innovación, que sea un sujeto sensible con los problemas de la comunidad y sobre todo, con convicción profesional y compromiso social.
Junto a las exigencias del PEN que son valiosas, el docente merece un trato digno para tener condiciones materiales y espirituales decorosas. Por tanto, requiere reconocimiento social, real valoración de su trabajo y una remuneración justa. Tres condiciones elementales que refuerzan su vocación y compromiso.
Encinas, resume la valía del docente cuando dice, "el cargo más alto en una democracia es el de ser maestro".
Siendo verdad esa afirmación, sin menoscabo de los que trabajan en la ciudad, es hora de dar especial atención a los docentes de las zonas
andinas y amazónicas. Ellos asumen su función traspasando los límites de la
escuela, no solo en el ámbito cultural, sino también en la vida organizacional y
político. Hay muchos ejemplos al respecto. El maestro que trabaja con compromiso es un líder en potencia que refuerza el desarrollo local. Somos conscientes que el liderazgo conmueve y educa.
Maestros en cifras .- Según la Unidad de Estadística Educativa del Ministerio de
Educación, al 2016, el sistema
educativo peruano contó con 548621 docentes entre la escuela pública y privada,
nombrados y contratados.
Veamos el
siguiente cuadro:
NUMERO DE DOCENTES A NIVEL NACIONAL
2016
|
||||||
NIVEL
|
NIVEL
|
NÚMERO
|
TOTAL
|
|||
EDUCACIÓN BÁSICA REGULAR
|
INICIAL
|
93938
|
493766
|
|||
PRIMARIA
|
204444
|
|||||
SECUNDARIA
|
195384
|
|||||
EDUCACIÓN BÁSICA ALTERNATIVA
|
12956
|
12956
|
||||
EDUCACIÓN BÁSICA ESPECIAL
|
3886
|
3886
|
||||
EDUCACIÓN TÉCNICO-PRODUCTIVA
|
10552
|
10552
|
||||
EDUCACIÓN SUPERIOR NO UNIVERSITARIA
|
PEDAGÓGICA
|
3353
|
3353
|
|||
TECNOLÓGICA
|
23074
|
23074
|
||||
ARTÍSTICA
|
1034
|
1034
|
||||
TOTAL
|
548621
|
|||||
SECTOR
|
PÚBLICO
|
371299
|
||||
PRIVADA
|
177322
|
|||||
Fuente: Ministerio de Educación Elaboración propia |
Representa casi el 2.4% de la PEA, distribuida en todo el país; pero sus condiciones de trabajo no son nada sencillas, recordemos a la maestra Gloria Paucar de la escuela de Shapray de la provincia de Lauricocha de la región Huánuco cuando el iniciar el año escolar 2015 publicó por el Facebook "Los niños estudian en un salón húmedo, con un charco de agua y frío intenso. (…) Pero, a pesar de todo, ellos dan buena cara al mal tiempo y se divierten jugando y expresándose en su lengua materna"; si parafraseamos relacionado al rol del maestro puedo resumiría a “junto a sus niños sonríe y trasciende, convencido de su digna labor al servicio de la patria, a pesar de los maltratos, remuneración precaria y muchas carencias.”

El cuadro nos ofrece muchas aristas para el análisis. Muestra
que el tercio del magisterio trabaja en la educación privada, lo que le genera un gran ahorro fiscal al Estado; Según María Balarín (Grade) a 1998, la
educación privada representaba el 13%, y con sorpresa, para el 2014 se elevó al 26%.
En Lima, la escuela privada llegó al 53% al 2013 (Ricardo Cuenca) frente a lo que era el 29% al 2004. Esta realidad obedece a varios factores, entre ellas, a una falsa creencia de que lo privado es mejor; pero en la práctica, nos dice Cuenca, un alto porcentaje de escuelas ubicadas en zonas de población de alta concentración tienen resultados educativos similares o más bajos (peor) que la escuela pública. Esa realidad pone en cuestión la labor docente, pero también nos ayuda a entender que los resultados exitosos están directamente vinculados a las condiciones favorables, y no solo al profesionalismo del docente.
En Lima, la escuela privada llegó al 53% al 2013 (Ricardo Cuenca) frente a lo que era el 29% al 2004. Esta realidad obedece a varios factores, entre ellas, a una falsa creencia de que lo privado es mejor; pero en la práctica, nos dice Cuenca, un alto porcentaje de escuelas ubicadas en zonas de población de alta concentración tienen resultados educativos similares o más bajos (peor) que la escuela pública. Esa realidad pone en cuestión la labor docente, pero también nos ayuda a entender que los resultados exitosos están directamente vinculados a las condiciones favorables, y no solo al profesionalismo del docente.
Por otro lado, las cifras no indican que la demanda educativa y la cobertura estén satisfecha. Los datos nos dicen que la educación en la primera infancia aún
no es universal. Hay evidencias que aun tenemos aulas con sobrecarga de alumnos; que no se cuenta con ningún programa especial (planteada por Picón, Cesar) de educación continua ni de especialidad para la población adulta, el arte, el deporte y el idioma; las comunidades nativas no cuentan con maestros preparados para ese
contexto efecto de la exigencia de la nota 14 para el ingreso a los pedagógicos, entre otras. Es decir, el déficit está en nuestras narices. Claro, el reajuste presupuestal mezquino prima sobre las otras razones técnicamente requeridas, donde el MEF actúa como órgano especializado en educación, sencillamente por que son los "encargados" de distribuir el presupuesto y eso definitivamente está mal.
Oferta de
la Formación Docente. - La estadística de la educación superior está así:
CENTROS
SUPERIORES
|
TIPO
|
A
1980
|
Al
2015
|
Universidades
|
Público
|
25
|
51
|
Privada
|
10
|
91
|
|
Institutos de formación magisterial
|
TOTAL
|
40[1]
349[2]
|
197
|
Fuente: Exposición de
Pablo Sandoval -UNMSM- ponencia en la UPCH – tema: Universidad y
desafíos de la interculturalidad. 28/06/2017.
Elaboración propia
INEI
(1)
1981, incluye
públicos y privados
(2)
2005, incluye
públicos y privados
El cuadro nos muestra un
crecimiento exponencial de los centros de educación superior. Esto se masificó a
partir de la dación del DL N° 882 aprobado por la dictadura fujimorista en 1996,
cuyo Artículo 1º dice “… establece condiciones y garantías
para promover la inversión en servicios educativos, con la finalidad de
contribuir a modernizar el sistema educativo y ampliar la oferta y la
cobertura.”
En la práctica, el objetivo de la modernidad sigue siendo su talón de Aquiles, pero a todas luces, en su momento fue un negocio lucrativo para las universidades que ofertaron formación docente. Se multiplicó el servicio, pero lejos de ser competitiva, devino en crisis de la calidad de
la formación profesional, agravada con la implementación de un currículo
reduccionísta en los institutos superiores pedagógicos, y con la supresión de
asignaturas de investigación en las universidades, so pretexto de la lucha
contra el terrorismo.

Una formación docente de “calidad” sigue siendo una
necesidad urgente para el país, pero no hay nada que diga que eso será posible en corto
plazo. Los programas que el MINEDU implementa tiene una pequeña cobertura, y
no se logrará grandes cambios si no se trabaja con el actor principal que es el maestro
de aula.
En resumen, el año 2007 fue uno de
los años más críticos para el docente. Las contradicciones Estado – maestro se
agudizaron. El MINEDU enfiló sus baterías contra la imagen del docente y su representación
sindical el SUTEP. Se aprobaron leyes, decretos y resoluciones, para obligar al
maestro a nuevas reglas de juego con evaluaciones, restricción de sus derechos,
afán de despido y y disminución de sus derechos. Se buscó enfrentar al docente
con los padres de familia, culpándola sin rubor de los bajos resultados en las evaluaciones
estandarizadas. En lo fundamental, esa realidad supervive con alto grado de
conflictividad que para ser resuelto exige que las autoridades del sector
comprendan que la carrera docente no es una profesión técnica y mecánica. Los que dirigen el sector tienen que saber, que la labor docente tiene que ver con seres humanos de pensamiento complejo,
donde el rol del docente no es solo hacer que los alumnos logren los objetivos
del aprendizaje, sino, sobre todo, que comprendan la realidad para usar en el proceso del
aprendizaje y transformar el mismo.
Presupuesto
para educación. - El
Acuerdo Nacional y el PEN, son documentos de Política
de Estado que orientan mejorar la inversión en educación. Sostienen que el
presupuesto no debe ser menor al 6% del PBI. Para lograr dicho porcentaje,
se trazó una estrategia de incremento anual del 0,25%. De ser así, al 2011 se habría llegado
al 5% y al 2015 a la meta propuesta. Pero los gobiernos de turno no
mostraron voluntad política. El 2016 tuvimos el 3.8% del PBI, el más
bajo de América Latina, y si se retoma la estrategia de incremento a partir del 2018 (poco probable), se necesitaría 9
años para lograr un presupuesto meta. Es decir, al 2026 tendríamos el "presupuesto soñado" allá por el año 2002. Esta cruda realidad nos dice, que llegaremos al bicentenario sin entender el
valor estratégico de la educación para el desarrollo nacional. Es imperdonable.
Conozcamos algunos datos. Según el BM, la inversión en educación en américa latina en función al PBI
es lo siguiente, al 2010: Brasil 5.8%, al 2011: Argentina 6.3%, Paraguay 4.8%,
Uruguay 4.5%, al 2012: México 5.2%, Colombia 4.4%, Ecuador 4.4%, República
Dominicana 2.2% y el Perú 2.7% subiendo al 2015 al 3.5%, porcentaje distante de
Bolivia y Venezuela que al 2010 destinaron el 6.9% y Cuba el 13%.
De algo tenemos que estar seguro, el logro de los resultados educativos esperados, en cualquier parte del mundo y modelo económico, está directamente relacionado a la inversión y a la atención que le brinde el Estado; mientras tanto, serán solo buenos deseos y compromisos. Si no se atiende todos los componentes consustanciales para una buena educación, no será posible lograr esa educación que responda al desarrollo nacional con visión de país, como bien lo planteó Jorge Basadre.
De algo tenemos que estar seguro, el logro de los resultados educativos esperados, en cualquier parte del mundo y modelo económico, está directamente relacionado a la inversión y a la atención que le brinde el Estado; mientras tanto, serán solo buenos deseos y compromisos. Si no se atiende todos los componentes consustanciales para una buena educación, no será posible lograr esa educación que responda al desarrollo nacional con visión de país, como bien lo planteó Jorge Basadre.
En concreto, el actual presidente se comprometió incrementar
las remuneraciones del docente; además, es una exigencia permanente del SUTEP.
Es conocido que se han hecho esfuerzos para incrementar los sueldos de los nombrados y
contratados, pero en líneas generales aún son muy insuficientes. El SUTEP ha planteado que la remuneración base del maestro debe ser la suma de S/. 2430 soles, equivalente al 60% de la UIT 2017. Consideran ellos que el monto equipara al costo de vida y las devaluaciones económicas. Bien sabemos, mientras no haya incremento del
presupuesto para el sector y voluntad política de los gobernantes, eso será imposible. El cierto, el incremento del presupuesto es determinante para mejorar los ingresos de los
maestros; además, permitiría que ya se les pague los beneficios económicos por
preparación de clases, gratificaciones y otros derechos retenido injustamente desde 1992, con el DS N° 051-92-ED. dada por el gobierno de Fujimori.
Salud docente y seguridad social: Los docentes del
sector público nombrado o contratado en las plazas presupuestadas están
asegurados y atendido por Essalud, pero los servicios para nada son los mejores. La vía crucis de los pacientes en dicho nosocomio es escalofriante. En cuanto al sistema pensionario, la ley N° 20530 se va extinguiendo paulatinamente, y están vigente las leyes N° 19990 y de las AFPs que no ofrecen una pensión digna. Los aportes que por un lado son bajos, no garantizan una pensión decorosa, convirtiéndose en un insulto a los años de servicio. Referente a las AFPs, los docentes son conscientes del riesgo de sus fondos, y de la perversa manera de pagar sus beneficios. En esta tema hay mucho por mejorar y se debe exigir que el estado asuma su rol de regular y proteger. Es un tema de futuro y subsistencia. En concreto, los docentes no tienen un aseguramiento integral
acorde con la labor que desarrollan que le brinde tranquilidad y seguridad. Es importante trabajar una propuesta integral.
En cuanto a la salud, el año 2002, la OREALCC/UNESCO encargó a un grupo de profesionales de
diferentes países para hacer un análisis de la situación de la salud docente en
la región. El objetivo fue conocer las enfermedades que más le afectan. El estudio arrojó datos interesantes. Por
cuestiones metodológicas, se identificaron por rango de edad y los padecimientos de
algunas enfermedades en función de ella. El resultado fue el siguiente “La
gastritis predomina más entre los 30 y 59.9 años, así como el estrés; los
resfríos frecuentes y trastornos ginecológicos entre los 30 y los 49.9 años;
las várices en la piernas, la hipertensión arterial, disfonía, lumbago-ciática
y cistitis entre los 40 y 49.9 años; y por último, las enfermedades a la
columna entre los 30 a 49.9 años y los 50 a 59.9 años.”

Si seguimos así, a mediano plazo se verán afectadas la salud física y emocional del docente. La presión es tal, que los maestros ya no tienen el tiempo suficiente para que le dedique atención a los asuntos de la familia y el esparcimiento, elementos claves para una buena salud mental y emocional.
En este tema, los docentes de las zonas rurales son los que más desventaja tendrían frente a sus pares de la zona urbana; y por otro lato, un alto porcentaje de los docentes del sector privado estarían altamente desprotegidos por no tener regulado ni formalizado su situación laboral. No contamos con estudios estadísticos que reflejen en cifras esta dura situación de un modelo económico perverso, pero es interesante reflexionar.
Otro tema
complementario y optimista de este estudio y que le da valor al docente es su compromiso con
su carrera profesional, según la OREALC, “El profesor considera en
un 86.7% que su trabajo es estimulante y un 98.8% interesante. En cuanto al rol
de formador, el 98.1% considera que su trabajo es importante para la sociedad,
aunque la mayoría (70.7%) siente que ésta no lo valora, pero que sí es valorado
por la familia (77.3%).”
Finalmente, el tema de
la salud y la seguridad social tiene que ver con una serie de otras condiciones
que merecen ser atendidas. Cuando se hace un menú de condiciones adecuadas para
el trabajo docente, se hace propicio contar con ambientes decorosos, buen trato y clima
laboral armonioso, alimentación y medio ambiente sano y saludable, ingresos
económicos equilibrados a sus necesidades básicas, reconocimiento social a la profesión,
facilidades para su formación continua, acceso a la cultura y recreación,
atención a sus demandas en forma oportuna y conforme a ley, disposición de
medios y materiales que le faciliten cumplir mejor su función educadora, entre otras.
Ser maestro es gratificante, le toca a la sociedad y al estado reforzarla.
Ser maestro es gratificante, le toca a la sociedad y al estado reforzarla.
Lima, 06 de julio del
2017
Referencia
Bibliográfica:
http://www.americatv.com.pe/noticias/actualidad/huanuco-profesora-denuncia-precaria-situacion-colegio-rural-n177892
Proyecto educativo Nacional del Perú.
http://www.grade.org.pe/upload/publicaciones/archivo/download/pubs/analisis-2.pdf
Proyecto educativo Nacional del Perú.
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